Acapulco al borde del colapso: Ciudadanos claman por soluciones ante el caos
Calles destrozadas, socavones peligrosos y un sistema de drenaje ineficiente convierten cada lluvia en una amenaza constante de inundación
Por Humberto Díaz de los Santos
El icónico puerto de Acapulco enfrenta una crisis profunda que amenaza su futuro. Los acapulqueños lidian diariamente con obras inconclusas y la ausencia de servicios básicos como agua potable y drenaje. ¿Qué está pasando en este paraíso turístico?
La infraestructura urbana de Acapulco está al borde del colapso: calles destrozadas, socavones peligrosos y un sistema de drenaje ineficiente convierten cada lluvia en una amenaza constante de inundación. A esto se suma la falta de mantenimiento en el alumbrado público, que ha dejado amplias zonas sumidas en la oscuridad, propiciando un clima de inseguridad. Mientras tanto, la lenta rehabilitación de la Costera Miguel Alemán, principal vía turística, no solo afecta la movilidad, sino que agrava la deteriorada imagen del puerto. ¿Qué implica todo esto para quienes viven y visitan la ciudad?
La población se cuestiona si sus autoridades están realmente comprometidas con encontrar soluciones o si solo buscan desviar la atención con acusaciones mutuas. El gobierno estatal, en lugar de actuar con firmeza, parece sumido en una guerra de declaraciones sin resultados tangibles. ¿Podrán las autoridades recuperar la confianza de la gente?
Con las festividades decembrinas a la vuelta de la esquina, el panorama se agrava. El turismo, motor económico de Acapulco, se retrae ante y el evidente deterioro de un puerto que alguna vez fue sinónimo de belleza y prosperidad. La incertidumbre crece, y con ella, el clamor de una ciudad que exige respuestas urgentes. ¿Habrá esperanza para Acapulco?